martes, 24 de marzo de 2009

CORRIENTES DE PENSAMIENTO MAS INFLUYENTES EN LA TLCD

REPUBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA
UNIVERSIDAD CATOLICA CECILIO ACOSTA
COMUNICACIÓN SOCIAL
CATEDRA: TEORIA DE LA COMUNICACIÓN









CORRIENTES DE PENSAMIENTO MÁS INFLUYENTES EN LA TLCD












BACHILLER:
PEDRO LUIS GIMENEZ
C-I: 16 303 067

SECCION: 1





1) ES EL FUNCIONALISMO?

El Funcionalismo es la primera escuela teórica que sistematizó el estudio de la comunicación de masas. Se originó en Estados Unidos de Norteamérica y ha organizado, en términos generales, la mirada hegemónica en lo que a los medios masivos se refiere.

Un ejemplo muy simple de funcionamiento funcionalista en nuestra sociedad: el raiting televisivo se funda en que la cantidad (de televidentes) es la que determina la calidad del programa (o algo parecido: lo que es consumido por muchos tienen necesariamente un valor positivo). Lo cuantitativo reemplaza lo cualitativo.

El Pragmatismo Filosófico, el Conductismo psicológico y el Funcionalismo Sociológico fueron las disciplinas fundamentales en las que se basó.

En el marco del Positivismo –fuertemente ligado con el Funcionalismo- se concibe a la sociedad como un organismo. Se parte de la TEORIA DEL EQUILIBRIO. En otras palabras, la sociedad es un todo armónico que puede padecer “agresiones” (externas y/o internas) por parte de elementos indeseables. Esas “agresiones” pueden desestabilizar ese equilibrio que está visto como un valor positivo. Frente a tales desestabilizaciones, la sociedad debe actuar de manera tal de restaurar el “orden perdido”.

Como señalan A. M. Mattelart, “la primera pieza del dispositivo conceptual de la Mass Communications Research data de 1927”. Se refieren al libro del sociólogo Harold Lasswell (1902-1978), llamado Propaganda Techniques in the World War. En esta obra, H. Lasswell emplea la experiencia de la guerra de 1914-1918, la primera guerra total. Los medios de difusión se presentan como instrumentos decisivos para “la gestión gubernamental de las opiniones”.

Propaganda y democracia se ligan indisolublemente, pues se cree que el único modo de “ganarse” la adhesión de las masas es la propaganda (a lo que se le suma que resulta mucho más “barata”, dice H. Lasswell, que la violencia o la corrupción u otras técnicas de gobierno frecuentemente utilizadas).

En esta perspectiva, el Funcionalismo inicial se consagra la omnipotencia de los medios masivos, concebidos como “instrumentos de circulación de los SIMBOLOS EFICACES”. La audiencia es considerada –en el Modelo de la Aguja Hipodérmica, forjado por H. Lasswell- como “un blanco amorfo que obedece ciegamente al esquema conductista ESTIMULO-RESPUESTA”. Los medios producen un impacto, un efecto directo e indiferenciado sobre los individuos “atomizados”.

Sin embargo, esta perspectiva se modificará con posterioridad y se podrá reconocer el siguiente recorrido en el marco de la corriente Funcionalista:

a) Modelo de la Aguja Hipodérmica

b) Funciones (de los medios)

c) Efectos

d) Enfoque o Modelo de los usos y gratificaciones.

II. EL ENFOQUE DE LOS USOS Y GRATIFICACIONES

Es verdad que lo más frecuente es que, en la actualidad, nos preguntemos cómo funcionan y qué hacen los medios masivos (la radio, el cine, los diarios y las revistas, la televisión o la computadora, en particular Internet) con nosotros. Para ser más precisos –y algo irónicos-: con los Otros (nosotros, por lo general, estamos excluidos de esos presuntos o no tan presuntos efectos).

En esto se focalizó el Funcionalismo de las funciones y de los efectos.

Sin embargo, allá por los 70, se empezó a invertir la pregunta original: ya no es qué hacen los medios con quienes los consumen sino qué hacen los usuarios con esos medios que los consumen.

Katz, Blumler y Gurevitch (1974) señalan precisamente que el Enfoque de los usos y gratificaciones parte de la base de que el individuo (o “público”) utiliza los mensajes de los medios y que tal o tales usos actúan como variables que intervienen en el proceso del efecto final. Esta perspectiva implica una perspectiva en la que se une la exploración de la conducta individual con la búsqueda de las formas en que los sujetos crean y gratifican sus necesidades.

Los medios son considerados como alternativas funcionales para la satisfacción de determinadas necesidades (que también pueden ser satisfechas con otras fuentes con las que, por ende, compiten).

Cuando las circunstancias sociales, por ejemplo, producen tensión y conflicto, el medio puede producir alivio.

Cuando las circunstancias sociales, por ejemplo, crean conciencia sobre un problema determinado, el medio ofrece información.

Cuando las condiciones de existencia material son insuficientes o paupérrimas, el medio se puede presentar como un sustituto (compensación simbólica).

Cuando una sociedad produce ciertos valores “novedosos”, el medio puede funcionar como un elemento de afirmación y refuerzo.

El Enfoque de los usos y gratificaciones produjo, por lo tanto, implicó un cambio de mirada; expresó una variación muy significativa en la perspectiva teórica-metodológica. Se llevó a cabo un desplazamiento: el público -antes pasivo o con poca predisposición para operar sobre los discursos mediáticos- ahora es concebido como “activo”. Se entiende que el público usa los medios para algo, no es inerme, no es un autómata, no es “alienado”. El público es capaz de gratificarse con los usos que “inventa” y que no siempre son los previstos.

III. EL CONSUMO TELEVISIVO: LA RESTAURACIÓN DEL EGO HUMILLADO

Allá por 1968, G. Wiebe afirma que no puede aceptarse la hipótesis de “la predilección por la basura por parte del público”, que pareciera desprenderse de muchas investigaciones.

Su hipótesis, claramente provocativa, es que la conducta observada en el individuo en relación con el consumo de los medios, en particular de la televisión, debe tener alguna utilidad psicológica “positiva”. Considera que si se logra identificar cuál es esa utilidad, se podrá aplicar este conocimiento al bienestar general.

En vez de centrarse en la observación de los medios, dice G. Wiebe, hay que examinar pormenorizadamente las pautas de conducta psicológica y sociológica (que son independientes de esos medios) de los sujetos.

¿Cuáles son los problemas que se le presentan al niño en su conformación? ¿Cómo ese niño se va convirtiendo en alguien adulto?

Hay dos factores psicológicos en la conducta del público de los medios masivos.

Una de las dificultades que se le presenta al niño es la adquisición del concepto de “Otro”. Existe un marcado egocentrismo en el niño. Predomina en él el auto-descubrimiento y la auto-protección. El logro “unilateral” de la auto-expresión y gratificación sin exigencia de contrapartida (o sea, de demanda por parte del Otro) le resulta sumamente placentero y “fácil”, ya que nada es lo que se le pide a cambio. Todo es lo que recibe, nada es lo que se ofrece o entrega.

Los medios masivos, evalúa G. Wiebe, “eliminan” precisamente a ese Otro (entre otras cosas porque siempre estamos en presencia de signos que están en lugar del Objeto, de la cosa y no de la cosa) y el individuo reasume placenteramente su posición infantil sin obligaciones ni responsabilidades de ningún tipo.

La otra dificultad que se les presenta al niño y al adolescente es la socialización. Existe una resistencia del individuo al proceso de socialización por el que el individuo (etimológicamente lo in-divisible) se transforma en un integrante más del grupo. Ahora bien, el grupo “exige”, “pide”, “reclama”. Y el individuo se “adapta” con dolor, porque tiene que conceder, debe realizar actos que, en lo profundo, no desea pero que los Otros marcan como condición sine qua non para reconocerlo como un integrante más del grupo.

IV. LA ELIMINACIÓN DEL OTRO COMO REGRESION INFANTIL

La socialización del individuo implica tres tipos de conducta:

a) el aprendizaje y el perfeccionamiento de la conducta prescripta (los llamados

Mensajes directivos);

b) la estabilización de la conducta en lo cotidiano (los llamados mensajes

Protectivos);

c) el contragolpe o represalia, como mecanismo de mitigación e indemnización simbólica (los llamados mensajes restaurativos).

La televisión, según G. Wiebe, se vincula centralmente con los mensajes restaurativos que son fundamentales para la socialización del individuo, que se ha visto forzado a dejar de lado sus deseos y particularidades para poder integrarse al grupo.

Ese individuo necesita restaurar su imagen dañada, humillada, por ese exterior que se le ha impuesto con todo el rigor. Su Ego ha sido herido por las concesiones que ese “individuo” tuvo que realizar a lo social-colectivo. Su “individualidad” fue afectada por la presión de lo social.

En otras palabras, los medios audiovisuales, en particular la televisión, abastecen la renuencia a reconocer y a encarar al Otro.

La permisividad y la enorme soledad en la que se encuentra el televidente maximizan la posibilidad de que estos medios audiovisuales sean elegidos como elementos más que adecuados para esa imprescindible “gratificación inmediata”.

El individuo, de esta manera, tiene una suerte de regresión infantil. Nada es lo que se le pide, nada es lo que se le exige, no está obligado a ninguna contrapartida…Se siente gratificado como un niño que come una golosina tras otra porque sus padres están ausentes…No hay distancia: sujeto y objeto se mezclan en una sola masa amorfa…No hay valores, no hay diferencias…Sólo el placer de mirar imágenes que se suceden las unas a las otras ininterrumpidamente…

Y el placer nunca está mal en una sociedad de consumo en la que la insatisfacción (constante) es imprescindible para garantizar (paradójicamente) su funcionamiento: la lógica del consumo exige la insaciabilidad del consumo.

El problema central es que ese niño-televidente (que ya no es biológicamente un niño, aunque su psiquis se haya “detenido” en la infancia) ha efectuado un trueque estremecedor: su libertad (el adulto se diferencia del niño en que es autónomo o relativamente autónomo, decide) ha sido entregada a cambio de un mundo en el que el Otro afortunadamente no existe.

Leonardo Varela

Profesor e investigador UBA y UNLu.

2) ESTRUCTURALISMO FRANCÉS

E. DURKHEIM (ED.) Y LA IMPORTANCIA DE LA HERENCIA POSITIVISTA.

Con E. D la ciencia social francesa se emancipa del reduccionismo biológico.

La rigidez del sistema educativo francés hizo que hasta los años 20 no aparecieran los estudios académicos de antropología. Hoy todavía se entiende por antropología, solo la física.

Los estudios etnográficos en su mayoría se desarrollaron en los años 30

Durkheim, más sociólogo que antropólogo, veía los hechos sociales como entidades sui generis más espirituales que materiales. Poco a poco la escuela fue adoptando una postura que oscila desde un idealismo similar al hegeliano (ED.) a un metalismo casi cartesiano con Lévi Strauss...

La escuela francesa, al igual que la americana se alejó de la perspectiva evolucionista estimulando los enfoques emic al modelo de los análisis lingüísticos no entrando en el hallazgo de los principios nomotéticos de los fenómenos socioculturales.

ED. ha influido en la sociología y antropología de todo el mundo marcando la orientación de las escuelas funcionalistas y estructural funcionalista.

ED. Muestra variedad de facetas desde el positivismo materialista al misticismo y según Harris no evito ser ambiguo.

El sociólogo americano Talcot Parsons ha estudiando a ED en relación con a. Comte (las ideas gobiernan el mundo), viendo entre ambos un diferente positivismo pues encuentra que el de Comte (que veía en la especialización una amenaza subversiva contra el progreso ordenado) es distintos del hegeliano mostrando a ED a mitad de camino entre Hegel y la tercera vía de Max Weber. Sin embargo para Harris la escuela francesa ha sido idealista y sostiene que a quien ED debe su influencia más que a Comte es a Saint Simon.

ED. Quiso demostrar que la división del trabajo y la especialización podía tener una explicación distinta de la económica (incremento de la productividad) y que esta lo que conllevaba ante el incremento y disgregación de la sociedad era el aumento de la dependencia mutua y por tanto la cohesión social. Esta solidaridad, a la que llamó orgánica por contraposición a la mecánica, eclipsa a la más antigua que se producía por la semejanza entre los individuos [1].

Tanto Saint simón como Comte, que hablaba de orden y progreso, y ED, hablando de solidaridades y cohesión son conscientes de los efectos disgregadores y cohesivos de la división del trabajo. El lenguaje de la escuela francesa en su contexto social (incremento de las luchas proletarias) actúa de forma positiva como amortiguador entre la ciencia de lo social y la agitación revolucionaria política y social del XIX y comienzo del XX.

SOLIDARIDAD SOCIAL CONTRA LUCHA DE CLASES. DURKHEIM, SPENCER Y MARX.

El uso del concepto se inserta en la formulación de teorías conservadoras que enlazan con el funcionalismo.

Los marxistas estudiaban lo que se necesitaba para que el organismo social se disgregase, Spencer R. Brawm y Mallinowski, lo hacían a la inversa viendo que podía mantener la cohesión. Al final desde el punto de vista científico los dos enfoques son útiles incidiendo en la investigación de modelos autorregulados de equilibrio socio cultural.

M. Mauss es sus escritos sobre ED informa el interés que éste tenía en su juventud por la relación entre el deseo de Durkheim de construir una nueva ciencia de lo social, tras el desastre del desenlace religioso de Comte, por el interés que tenía en la relación entre el individualismo y el socialismo.

Spencer formuló los tipos de sociedades militares e industriales.

ED. Los de las solidaridades mecánica (que se funda en los lazos de sangre o parentesco) y orgánica (basada en la división del trabajo) y sostenía que lo semejante entre ellos era superficial puesto que Spencer consideraba que al final todas las relaciones estarían dominadas por el contrato de forma que toda la sociedad sería una red de contratos, acuerdos individuales dependiendo del grupo en grado inversamente proporcional al número de acuerdos privados.

Para Harris este hecho en Spencer se asemeja a la idea de Marx de la nebulosa utopía de la sociedad sin clases ni estado tras la revolución proletaria, algo que implicaba la eliminación de todos los nexos supraindividuales y socioculturales. ED. Postula precisamente lo contrario, su incremento y esta es su principal aportación a la teoría cultural.

EL ESTADO NO DESAPARECERÁ

Al aumentar la solidaridad, consecuencia del incremento de la división del trabajo, se intensifica la mutua dependencia entre individuo y grupo y por consiguiente la expansión del aparato administrativo y estatal.

NECESIDAD DE UNA CIENCIA DE LO SOCIAL.

Ante la disminución de los efectos individualizadores piensa ED en la necesidad de la ciencia de lo social para que estudie las funciones sociales como distintas de las individuales. En su obra Las regas del método sociológico enuncia los principios epistemológicos de dicha disciplina reafirmando la posición superorgánica explicita en la tradición marxista y por tanto inaceptable fuera de ella. El aspecto superorgánico en ED es antecedente del de Kroeber al hablar de la autonomía del nivel cultural, sin embargo la tendencia idealista y mentalista se impuso dejando a la antropología francesa sumergida en el estudio de propiedades místicas del alma de los grupos

RECHAZO DEL RACISMO Y DE LOS FACTORES PSICOLÓGICOS INDIVIDUALES.

ED. consideraba básico en la ciencia de las funciones sociales entender los fenómenos como expresión distinta a los instintos psicobiológicos y a la elección voluntaria de los individuos. Sostenía que un fenómeno social no dependía de la raza puesto que en sociedades de la misma raza se daban culturas distintas y a la inversa.

Rechazó los factores raciales tanto por razones metodológicas como por parecerle una evasión de los problemas cuya solución entraría aplicando una metodología sociológica.

Pensaba que la relación entre la conciencia y las condiciones socioculturales, los hechos sociales, debían buscarse entre los precedentes sociales (esta es una de las reglas de su método) y no entre los estados de conciencia individuales) puesto que son las fuerzas sociales las que actúan sobre y a través de los individuos.

Esto recuerda a la forma en que Marx invirtió la posición hegeliana , sin embargo, Harris sostiene que, la semejanza entre ambos es mínima puesto que ED contrapuso a la conciencia individual la totalidad de las condiciones sociales mientras que para Marx lo que cuenta son los aspectos teconoecómicos y tecnoecológicos.

LA NATURALEZA DE LOS HECHOS SOCIALES.

La prueba de que una cosa es social, esta en su poder coercitivo. Demostrarlo era difícil para la ciencia puesto que los hechos sociales tienen existencia por sí mismos. Atribuye por tanto a estos hechos una naturaleza fenomenológica, operativamente inaceptable, para Harris porque ve que la ciencia social, que no puede funcionar sin defender la realidad de los rasgos, instituciones, etc., corre riesgos si separa esa realidad de la observación de la conducta de los individuos.

Solución: basar la jerarquía de las cosas sociales en constructor lógico empíricas ya que aunque los niveles de abstracción se apartan del contenido histórico conservan la realidad concreta que se define por los procesos lógico empírico.

Los ejemplos tales como la evitación de la suegra o la forma de pronunciar un fonema son elementos de la observación y desde ahí los investigadores construyen las categorías socioculturales.

Para ED la conducta individual es la reencarnación o reflejo de las entidades sociales dotadas de existencia independiente al margen de la expresión concreta de un individuo o de los procedimientos lógicos empíricos de quien observa. Afirma que los fenómenos no pueden definirse por su universalidad e igualmente que un movimiento repetido por todos, no se convierte en un hecho social. Aquí establece una dicotomía inexplicable para Harris al no poder encontrarle justificación operacional.

Ve un exceso metafísico en las cosas sociales al conceder que existen hábitos difundidos y adquiridos por aprendizaje que no encarnan ni reflejan hechos sociales y ED lo ve lógicamente posible porque la fuerza coercitiva de esos hábitos se debe a fuerzas internas a nosotros mismos mientras que la coercitivo de los verdaderos hechos brota de la conciencia exterior y colectiva.

EL ORIGEN DE LA IDEA DE ALMA COLECTIVA.

El idealismo de ED es secular sin dioses ni espíritus religiosos, rasgos de los que puede prescindir sin alterar su estrategia cultural. Protesta contra los que le llamaron idealista considerando que lo correcto sería llamarle racionalista. En la primera edición de Las reglas del método sociológico se manifiesta en absoluta revolucionario y que su determinismo es menos peligroso que el de los que ven los fenómenos sociales como resultado de una manipulación ilimitada que por artificio dialéctico puede invertirse.

Los intelectuales franceses siempre han rechazado el dilema idealista/materialista exhibiendo una ambigüedad culta. Tanto Comte como ED pretendieron encontrar una posición neutral porque la posición superorgánica que postula está modelada con el concepto de alma individual subjetivamente percibida.

Para ED. os hechos sociales son representaciones colectivas, o sea ideas experimentadas por el alma colectiva encarnadas en mentes y conducta humana. La conciencia colectiva es pues un juego entre la conciencia como fuerza moral subjetivamente experimentada y la experiencia del conocimiento consciente. Ambas quedan incorporadas al de alma colectiva por lo que dice Harris que todo está impregnado de imágenes y predicciones mentalistas e idealistas. Trasciende lo psicológico individual a base de suposiciones psicológicas que impregnan las cosas sociales de contenido idealista. A pesar de todo, ED fue acusado de materialista lo que le hizo negarlo con fuerza en su obra.

¿QUÉ CAUSA LA DIVISIÓN DEL TRABAJO?

Desde A. Smith (economista) el desarrollo de la división del trabajo se basó en la idea de que mayor especialización facilitaba medios eficaces y baratos para incrementar la productividad.

ED. Niega la solidez y firmeza de esta idea contraponiéndole una explicación que se centra en la importancia funcional y causal de la solidaridad social.

Ataca la idea de que la división del trabajo comporta un aumento de la felicidad. (Piénsese en la situación de las masas europeas a fines del XIX), que le llevó en otra obra, el Suicidio, a analizar porqué se producía y de que tipo era. Su polémica se dirige contra Spencer que sostuvo que la felicidad aumentaba con la capacidad productiva, diciendo que las cosas no ocurren así.

En la persona, unida por lazos de solidaridad mecánica, nada indica que sienta deseos de aumentar su productividad y excedentes. Según Harris esta explicación sorprendente remite a Boas y sus explicaciones para no dar interpretaciones económicas sobre el potlach, induce a ED a pensar que el deseo de mayor beneficio no es causa sino consecuencia de la división del trabajo.

Al pasar a ver la explicación que sustituye según ED a la económica vemos que la fuerza y prestigio de la escuela se basa en su rechazo del determinismo económico. Recordando a Darwin y su idea de competencia y lucha, mas activa, entre organismos de la misma especie ED dice que en la población humana esa rivalidad crece en proporción directa al crecimiento de lo que llama “condensación social” que se relaciona con los incrementos de población y densidad. Al progresar la condensación la cohesión mecánica (propia de grupos pequeños homogéneos) deja paso a la orgánica. A cada nueva incremento nuevo cambio y solución mediante el incremento de la división del trabajo puesto que la mutua interdependencia garantiza la cohesión social y reduce la competencia [2].

Teórico social francés y uno de los pioneros del desarrollo de la sociología moderna. Durkheim nació en Epinal (Francia) en el seno de una familia judía. Se graduó en la Ècole Nórmale Supérieure de París en 1882 y a continuación trabajó como profesor de derecho y filosofía. En 1887 comenzó a enseñar sociología, primero en la Universidad de Burdeos y después en la de París. Durkheim pensaba que los métodos científicos debían aplicarse al estudio de la sociedad, y creía que los grupos sociales presentaban características que iban más allá o eran diferentes a la suma de las características o conductas de los individuos. También estudió la base de la estabilidad social, es decir, los valores compartidos por una sociedad, como la moralidad y la religión. En su opinión, estos valores (que conformaban la conciencia colectiva) son los vínculos de cohesión que mantienen el orden social. La desaparición de estos valores conduce a una pérdida de estabilidad social o anomia (del griego anomia, 'sin ley') y a sentimientos de ansiedad e insatisfacción en los individuos. Explicó el fenómeno del suicidio como resultado de una falta de integración del individuo en la sociedad. Durkheim analizó esta correlación en su obra El suicidio: un estudio sociológico (1897). Para explicar sus teorías en sus escritos utilizó a menudo material antropológico, especialmente de sociedades aborígenes. Otros de sus libros son La división del trabajo social (1893), Las reglas del método sociológico (1895) y Las formas elementales de la vida religiosa (1912).

3) Marshall Mcluhan y la realidad virtual.

“Para la nueva generación de académicos, periodistas y hackers suele calificarse el legado de Mcluhan como si se tratara e una herencia religiosa o profética. Paúl Levinson comentó: Los esbozos para comprender nuestra era digital estaban en el estante de los libros de Mcluhan” (Horrocks. 2004, p. 13).

La llegada de la era de la información impulsada por los computadores, trajo con ella nuevas geografías como el ciberespacio, la realidad virtual, la Internet y la Web han despertado el interés por las teorías de Marshall Mcluhan. Él introdujo la idea de aldea global, afirmó que el medio es el mensaje, que las tecnologías deben ser consideradas como prolongaciones de nuestro cuerpo y nuestros sentidos, y definió los medios en cálidos y fríos: “El principio básico que decide si un medio es caliente o frío es el grado en el que ese medio amplia el sentido de uno mismo en alta definición. Es decir, es el grado en el cual uno de nuestros sentidos recibe mucha información. Una fotografía contiene más información que una viñeta, y por tanto es un medio más caliente. El teléfono es un medio frío por que la oreja recibe poca información. Por tanto el usuario tiene una mayor participación en un medio frío que uno caliente.” (Horrocks. 2004, p.89)

Las investigaciones hechas por Mcluhan sobre los medios de comunicación hoy son aplicables a la era virtual. No la considero como una versión falsa de la realidad, si no como una extensión de las facultades del hombre, que no podría ser considerado como naturaleza falsa. Para él lo virtual no conducirá a una huida radical de la realidad, ya que su tesis de esta se define como algo que existe antes del desarrollo histórico de la imprenta, pero que vuelve a renacer gracias a los medios electrónicos, de esta manera lo virtual supondrá un regreso a la realidad, no una evasión de esta.

Otra de las teorías de Mcluhan que hoy toman relevancia en nuestro medio es el espejo retrovisor. En esta asegura que la cultura funciona como un espejo retrovisor, por que los nuevos medios hacen que los anteriores se vuelvan obsoletos, tomando los anteriores como referencia. Levinson apoya esta noción al afirmar que el entorno digital absorbe el primer entorno electrónico de masas al tiempo que intensifica el alcance global de este último.

El mensaje final que Mcluhan quería dejar con su obra era que deberíamos tomar conciencia de los medios y realizar constantemente sondeos para poner a prueba sus efectos, creando de esta manera un enfoque crítico y reflexivo sobre lo virtual. Nos advierte sobre el impacto psicológico y sensorial que puede traer la inmersión en la realidad virtual, la cual puede llegar afectar la seguridad del individuo.

[1] En la época y en todas las escuelas sociológicas y antropológicas se está estudiando el efecto del crecimiento poblacional y el paso de la vida en comunidad a la vida en sociedad contraponiéndose ambos conceptos con distintos nombres.

[2] Así pues, la división, la especialización y pérdida de control de todo el proceso productivo por un solo individuo aparece como el bálsamo que evita la lucha del fuerte contra el débil

Cyber grafía:

http://www.ecosdeldia.com.ar/varela20080603.htm

http://perso.wanadoo.es/teresapastor/antrop/resumenes-docs/Historia_de_la_antropologia_M.HARRIS_Tema_7.doc

http://esteticadelasinterfaces2.blogspot.com/2007/03/marshall-mcluhan-y-la-realidad-virtual.html